Normalmente estamos acostumbrados a trabajar, a socializar, reunidos en pequeños grupos "tribales". Pero cuando el objetivo lo persiguen no sólo los componentes de una misma tribu (cuarenta millones de españoles) si no Homo Sapiens de todo un planeta se convierte en una explosión enfervorizada de éxtasis colectivo difícil de dominar. El poder de la tribu obtiene picos insuperables. Parecía que el poder mental de tantos millones de aficionados hubiéramos empujado también a ese "jobulani" dorado y blanco para que entrase por el arco jalonado por dos postes, un travesaño y una malla inmaculada. Y un sin fin de tótem coloreados de rojigüalda nos pusimos a jalear la palabra mágica del momento:
GOOOOOOOOOOL...!
Todos fuimos UNO. Lloramos, saltamos, reímos, gritamos, nos abrazamos, fuimos felices. Un ciclón de vanidad recala en nuestra sien inyectándonos de optimismo y "buen rollo", una cura efectiva a la gris enfermedad de la depresión y el miedo que padecíamos últimamente. Debemos luchar todos para que este empuje brutal de alegría siga reinando en nuestro día a día como pueblo alegre que somos por definición.
¡QUE VIVA ESPAÑA!
Mónica Francés
Dos cachorros de Homo Sapiens: mis hijos
1 comentario:
Hi monica, nice blog & good post. overall You have beautifully maintained it, you must submit your site for free in this website which really helps to increase your traffic. hope u have a wonderful day & awaiting for more new post. Keep Blogging!
Publicar un comentario