Mónica Francés, en su afán de posicionar la porcelana de Limoges donde se merece en la moda, nos muestra de forma magistral como se puede customizar una prenda elegante, con un tejido moderno en una prenda sofisticada, lujosa y joven.
El reto empieza en la tienda Gratacós (nicho de nuevos talentos creativos) el día 19 de mayo del 2010 con un vestido espectacular cedido por Suzie Wong y con las maravillosas piezas de porcelana de Limoges de Mónica Francés y acaba dos días más tarde con una joya de vestido.
Las características que hacen de la porcelana un material excepcional son su máxima dureza (en la escala de Mohs tiene el 10, es decir que solo se puede rallar con la punta de un diamante) que la hace inalterable ante las inclemencias del tiempo y la exposición de productos abrasivos y su seductora belleza que a nadie deja indiferente. Es más, toda la porcelana de Mónica Francés es lavable a cualquier temperatura e inclusive se puede centrifugar, es decir ¡Que la podemos lavar en lavadora¡... FANTASTIC¡
Mónica Francés añade a los componentes de la porcelana una fórmula secreta y mucho, mucho amor a este maravilloso material. En sus manos la porcelana cruza la dimensión de lo real y se transforma en preciosas piezas rodeadas de glamur y sueños.
Agradecimientos a la Casa Gratacós y a la firma Suzie Wong
El vestido quedará expuesto unas semanas en Paseo de Gracia 110 (Gratacós), Barcelona.
